La madera se ha utilizado en construcciones desde tiempos muy lejanos a los nuestros. Con el paso de los años, el uso de madera para los suelos dejó de ser una necesidad para convertirse en un lujo. En una preferencia decorativa. Esto tiene que ver con la funcionalidad de la madera frente a los materiales con los que se fabrican los suelos de manera habitual: los suelos de cemento y baldosas son más fáciles de mantener y resistentes que los suelos de madera. Sin embargo, como los suelos de madera conllevan ciertas desventajas a la hora de tenerlos en casa, sobre el año 1980 comenzaron a comercializarse los suelos laminados sintéticos.
¿De qué están hechos los suelos laminados sintéticos?
Antes de aprender cómo tratar los suelos laminados sintéticos, hay que comprender de qué están hechos. Este tipo de suelos está compuesto por varias capas de materiales derivados de la madera y sobre él se encuentra la lámina impresa con el dibujo que hayamos elegido. A su vez, sobre esta capa con el dibujo tenemos otras superiores que le otorgan al piso resistencia.
¿Cómo mantener este tipo de suelos?
Para mantener un suelo laminado sintético en óptimas condiciones, lo mejor es aplicar todas las medidas de prevención posibles. En este sentido, nos valen las mismas que podríamos aplicar para un suelo de madera:
- Utilizar alfombras para limpiar bien los zapatos antes de entrar a la sala o edificio y evitar que los materiales como la tierra o la arena vayan deteriorando el suelo.
- Utilizar protectores debajo de las patas de las sillas y de los muebles, además de tener mucho cuidado al rodarlos.
¿Cómo tratar los suelos sintéticos?
Estos suelos hay que limpiarlos cada día y a ser posible con una mopa o una aspiradora, medios que resultan más suaves para retirar la suciedad. Lejos de lo que muchas personas piensan, estos suelos sí que se pueden fregar aunque tendría que ser con una mopa húmeda o una fregona muy escurrida y siempre con productos adecuados.
En el caso de encontrarnos con manchas, bastará con usar una gamuza húmeda para quitarlas. Si se trata de manchas más resistentes, un poco de acetona o de alcohol de quemar puede resultar muy efectivo y no dañará el piso.
Los suelos laminados sintéticos son muy resistentes pero, como hemos podido ver, requieren bastantes cuidados. Normalmente suelen ser usados en oficinas y zonas de atención al cliente por lo que si quieres garantizar el máximo cuidado de los suelos de estas áreas de tu empresa y no dispones de personal específico para su mantenimiento, siempre puedes contar con el apoyo de una empresa de limpieza profesional.